Su admiración hacia el papel que juega la mujer ante la sociedad, no tiene comparación; el ímpetu y la forma de sacar adelante las situaciones, la hacen sentirse orgullosa de formar parte de ese maravilloso mundo femenino.
Nacida el 4 de marzo de 1993 en la República de Colombia, Susana Ochoa es dueña de su propia repostería, modelo, comunicadora social y su meta está encaminada, y es terminar de montar su línea de ropa.
Susana es una joven madre, a quien la vida le ha enseñado a no rendirse; su válvula de escape la encuentra trotando, así como descargando toda su energía montando a caballo y bailando, pero si de comida se trata, ella nos revela su adicción por el sushi.
Su rutina normal se centra entre el gimnasio, la universidad y su hijo; pasa las mañanas en sus dos primeras tareas y luego le dedica toda la tarde a su retoño.
La admiración que siente Susana Ochoa hacia las mujeres en general, no tiene punto de comparación, «Admiro a todas las mujeres, la labor que cada una hace en la sociedad y la forma de sacar las cosas adelante».
Con dos títulos profesionales, Susana destaca que su prioridad es su familia y sus amigos, y a todos ellos así como a sus seguidores y a todas aquellas chicas atraídas por la industria del modelaje y las agencias, a que luchen por sus ideales.
«Este medio no es fácil, acá hay oportunidades para todos; la belleza es relativa, pero sobre todo sepan que, siempre existirán puertas para tocar, lo importante es no rendirse».
