De pequeña jugaba con sus primas a ser presentadora de TV. Su abuela le regaló un cuento llamado «soy una reportera». Lo leía una y otra vez. Decía que al crecer se convertiría en reportera. Años más tarde, fusionó su gusto por el béisbol con la carrera de sus sueños: Patricia Hernández es comunicadora social y modelo.
“Siempre tuve la vocación de querer ser periodista, cuando veía a las reporteras dando las noticias veía a mujeres admirables, seguras de sí mismas, preparadas y muy inteligentes. Quería perfeccionarme igual, no solo por llegar a obtener un título universitario”, comenta en entrevista con Modelos Latinas.
Feliz, continúa: “Quería prepararme, aprender; tenía hambre de conocimientos y en cada materia, cada semestre, me enamoraba más de lo que estaba estudiando, de mi carrera, de lo que elegí para mí, ¡no me equivoqué!”.
La chica originaria de Cabimas, Zulia, Venezuela, que nació el 24 de noviembre de 1995, explica que comenzó a estudiar a principios del 2013, con 17 años recién cumplidos. “Hubiera comenzado un trimestre antes, pero a mis padres no les convencía la carrera. Eso llevó a optar por una beca estudiantil a la cual fui asignada por mérito académico para estudiar en la Universidad Rafael Belloso Chacín (URBE). Siempre supe lo que quise”, manifiesta.
Su sueño es una marca de ropa deportiva, “aprovechar la gente que me sigue y apoya desde siempre, seguir creciendo como marca personal”.
Se refiere a los humanos que admira. “Sigo a las personas que han construido un imperio sin pasar por encima de nadie, que son exitosos por el mérito propio, por su talento, por su esencia. Sin duda alguna, eso es inspirador para mí: conozco a varias, no podría decir una en específico” asevera.
Hernández más que plena por “haber seguido mis ideales y no los que otras personas querían para mí”.
Por esto, no existe ningún obstáculo. “Cualquier circunstancia, por grande o pequeña sea, te deja una enseñanza, nada que esté destinado a ser para ti se desviará de tu camino”, recalca la muchacha inspirada por el trabajo de la presentadora mexicana Alejandra Espinoza.
Diarismo
Los días de la amante de la comida italiana, el baile e ir de compras, son “bastante movidos”.
Cuenta que “por lo general, comienza después de mediodía, soy bastante dormilona, a menos que tenga una pauta o algún compromiso matutino. Siempre estoy haciendo de todo, soy modelo, soy periodista, hija, hermana, entre otros”.
Anhela encontrarse siempre cerca de los suyos, prefiere su hogar antes que otro lugar: ahí consigue paz.
“Soy una mujer muy familiar, me gusta pasar mucho tiempo de calidad con mi familia, mis hermanas son mi mundo. Soy la mayor de tres hembras, siempre trato de pasar la mayoría del tiempo con ellas, hacer cosas que a las tres nos gusten. Me gusta mucho conversar con mis abuelas, jugar con mis primitos: esos son los momentos con los que uno se queda. Soy de pocos amigos, pero los poco que tengo, a pesar de la distancia, siguen estando allí. Es mejor la calidad que la cantidad”, puntualiza la sagitariana.
Al ser polifacética, Patricia Hernández envía un mensaje a las mujeres de América Latina: “Estén dispuestas a aceptar malos comentarios, sin que eso las afecte. Ciertamente, habrá mucha gente que te quiera, pero los famosos «haters» también existen y la mayoría del tiempo esas personas buscan alguna debilidad tuya para aprovecharse y hacerte sentir mal, ¡nunca lo permitan!”.