En nuestra vida diaria tenemos tantas ocupaciones que se nos dificulta ir al gimnasio, pero igual deseamos hacer ejercicios. Entonces, hoy te decimos cómo resolver
El tiempo pasa tan rápido que a veces se nos va entre trabajo y quehaceres del hogar. Entonces, cuesta abrir espacio para hacer ejercicios.
La actividad física es un elemento fundamental para lograr el bienestar en el humano.
¡Es hora de actuar y dejar excusas a un lado, ármate de disciplina, constancia y amor por tu cuerpo!
Hacer ejercicios de manera sencilla
- Sube escaleras: si en tu trabajo o donde vives hay ascensor, no lo pienses dos veces, respira y prepárate mentalmente.
Repítete a ti misma: “El entrenamiento que no hago en el gimnasio lo hago día a día”.
Hacer ejercicios debe saltar a tu mente en todo momento, sube escalaras sin arrepentimientos.
- Labores domésticas: aunque no lo creas, la limpieza en el hogar también puede ser considerada dinámica física por el constante esfuerzo.
Practica estos consejos: cuando vayas a barrer, aprieta tu abdomen, contrae la musculatura y de vez en cuando aumenta velocidad.
Lo mismo si vas a coletear o lavar cualquier zona de tu casa, nunca dejes de relacionar con hacer ejercicios, pues estas en constante movimiento.
- Descarga algún vídeo que te motive: así podrás bailar con tu canción preferida. Baja rutina de ejercicios para hacerlo desde casa.
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Enfócate en seguir los pasos al ritmo de cualquier guía para hacer ejercicios, además deberías sentirte cómoda y tener la oportunidad de lucir como quieras.
Si aún eres principiante y no sabes cómo hacer de manera correcta los deportes, practica frente a un espejo.
- Alimentación e hidratación: de nada te sirve entrenar si no consumes comidas balanceadas.
Identifica cada porción: proteínas, carbohidratos y vegetales con cantidades moderadas, sin olvidar que debes tomar mucha agua diariamente, mantenerte hidratada al momento de hacer ejercicios.
