Pretende crear su marca de lencería y una fundación para apoyar a “mujeres madres cabeza de familia”.
Inspirada en el estilo de Carolina Herrera, Carolina Ramírez resulta ser una modelo virtuosa, inteligente y bien encaminada: se consagró como Reina de Las Américas 2019.
Sin embargo, en exclusiva con Modelos Latinas, dice: “Soy mi propia inspiración. Lo que me mueve es ayudar a las personas y demostrar que todo lo que nos proponemos lo logramos”.
Nació el 5 junio de 1990 en Colombia. Hoy día reside en la capital, Bogotá y es experta en Relaciones Públicas.
Si de pasatiempos se trata, la muchacha de signo Géminis, viuda, lee, viaja y come pizza porque le encanta su sabor. Mientras, prefiere disfrutar el lugar favorito, su casa, con la persona predilecta: “mi hijo”.
Con 29 años de edad, recuerda sus primeros pasos en el mundo del entretenimiento. “Empecé como modelo hace 10 años, cuando fui de chaperona a un reinado, terminé participando. Como relacionista pública hace 12 años cuando se me facilitaba mucho socializar con las personas”, explica.
Desde su percepción, “el estudio es algo que nadie ni nada te va a quitar, y nos hace sentir mejor a nivel personal, ¡cuando se quiere se puede!”.
Por ello, “si tuviera la opción de elegir nuevamente, tomaría el mismo camino”, revela la joven que lleva a su retoño al colegio, va al gimnasio, trabaja y, después, espera al pequeño en su hogar. Más tarde, realiza home office.
Para Ramírez, “no tener salud y perder la emoción por lo que haces” sería el único obstáculo en su vida. “El día que deje de amar lo que hago nada valdrá la pena”, sentencia.
“Nadie es perfecto y todos pasamos malos, buenos y felices momentos”, subraya por otro lado.
De cara a su trayectoria, recomienda a las féminas de América Latinas mantener “valores y principios. No puedes pasar por encima de las personas que te encontrarás a lo largo de la vida”.